Durante la actual administración federal se determinó la estrategia de pasar de volumen a valor: Sagarpa
Redacción Agro Orgánico

Ciudad de México. – El valor de la producción agroalimentaria de México alcanza un valor superior a 95 mil millones de dólares, como resultado de la inversión, el tránsito a una agricultura tecnificada y políticas públicas orientadas a la productividad y competitividad, destacó el secretario de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), José Calzada Rovirosa.
Durante su participación en el II Foro sobre Competencia y Regulación “En búsqueda de la eficiencia de los mercados” -organizado por la Secretaría de Economía (SE) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE)-, el titular de la Sagarpa afirmó que la competencia en el sector agropecuario y pesquero, así como el desarrollo de mercados internacionales, obligó al país a ser una potencia en producción y exportación agroalimentaria a nivel mundial.
Durante esta administración –agregó el funcionario– se determinó la estrategia de pasar de volumen a valor, lo que significa medir la producción no por volumen (230 millones de toneladas), sino por su valor y aportación directa a las finanzas nacionales y, principalmente, a la economía familiar de los productores mexicanos.
En un comunicado, la Sagarpa informó que, ante los titulares de Economía, Ildefonso Guajardo, y de Salud (SS), José Narro Robles, el secretario José Calzada recordó que el país mantiene un superávit comercial agroalimentario, “pero estamos lejos de su potencial, sin embargo, vamos en el camino correcto para lograr mejorar los ingresos a los productores del campo, a través del impulso a las cadenas de valor agregado”.
Respecto a la regulación, mencionó que México cumple con los estándares internacionales de sanidad y calidad para tener acceso a los mercados, lo cual se traduce en estar en el décimo lugar como exportador de alimentos, el séptimo como productor de proteína animal y sexto en ganado bovino.
En este caso, mencionó que se debe fortalecer aún más el hato ganadero para incursionar y expandir los mercados de Asia, Unión Europea, Península Arábiga y la Federación Rusa.
Además, dijo, se trabaja en la homologación y fortalecimiento de normas nacionales e internacionales para la venta y compra de productos agroalimentarios, en una corresponsabilidad equilibrada, toda vez que hablamos de la salud de las personas, de nuestra gente, sin que esto se convierta en una barrera comercial que afecte a los consumidores.
Precisó que la diversificación de mercados agroalimentarios permite un mejor equilibrio en el intercambio comercial y una mayor competitividad entre nuestros socios, lo que se traduce en mejores precios y calidad, en beneficio directo de productores y consumidores a nivel global.
Por su parte, el director general de la OCDE, José Ángel Gurría Treviño, mencionó los dos estudios realizados a México sobre Competencia en los Sectores Medicamentos y Productos Cárnicos, así como el informe de la Gobernanza de las Prácticas Regulatorias.
Puntualizó que de los trabajos se desprenden recomendaciones para fortalecer la competitividad en el país y, en consecuencia, estimular la inversión y productividad que permiten un mayor crecimiento económico, que tan sólo en los sectores medicamentos y cárnicos representa un impacto positivo de hasta 44 mil millones de pesos.
Destacó que las acciones realizadas en estos temas de mejoras políticas en competencia y medidas regulatorias por el actual gobierno de México permiten hablar de una reducción del 36 por ciento en las cargas administrativas, así como de una mejor política nacional regulatoria, todo ello a favor de las empresas y los consumidores finales.