La adquisición de Whole Foods por 13.700 millones de dólares ha sorprendido a propios y extraños
Madrid. – El último movimiento del “gigante” del comercio electrónico con la compra de una cadena de supermercados “física”, especializada en comida “orgánica” y dirigida a un segmento de cliente de poder adquisitivo medio-alto abre interrogantes en el sector.
Los movimientos de Amazon en materia de comercio de alimentos son escudriñados al detalle por sus competidores, sabedores de que la compañía liderada por Jeff Bezos amenaza con revolucionar el sector.
La adquisición de Whole Foods por 13.700 millones de dólares (unos 12.300 millones de euros) ha sorprendido a propios y extraños, en primer lugar por el elevado montante económico, lo que refleja la importancia de la apuesta.
Pero también llama la atención que se trate de una cadena de supermercados “física”, con más de 400 establecimientos -la mayoría en Estados Unidos, pero también está presente en Reino Unido y Canadá-, lo que ha disparado la especulación sobre si el objetivo de Amazon es el de contar con puntos de entrega a los que pueda acudir el cliente a recoger su pedido.
Especializada en orgánico
Mientras que la plataforma se ha hecho popular con su política de precios competitivos, Whole Foods es una marca muy extendida entre los sectores más jóvenes amantes de la comida orgánica y las clases más acomodadas de Estados Unidos.
“Millones de personas aman Whole Foods Market porque ofrecen los mejores alimentos naturales y orgánicos, y consigue que sea divertido comer saludablemente”, afirmó Jeff Bezos en el comunicado en el que se daba cuenta de esta operación.
El paso dado por Amazon representa un avance gigante, a la vez que más arriesgado, a partir de una serie de decisiones anteriores que incluían el comercio electrónico de comida fresca y la apertura de una serie de tiendas físicas.
Whole Foods, líder en productos orgánicos, estaba resintiéndose últimamente de la crisis que viene atravesando el sector comercial minorista tradicional, frente al avance del electrónico.
De hecho, importantes accionistas de la firma estaban presionando en favor de una fusión. Las ventas de Whole Foods han caído cada trimestre desde septiembre de 2015 y sus títulos han perdido la mitad de su valor desde su récord de 2013.
“Esta operación representa una oportunidad para maximizar el valor de los accionistas de Whole Foods Market, a la vez que extender nuestra misión y aportar la mejor calidad, experiencia, conveniencia e innovación para nuestros clientes”, destacaron desde la cadena de supermercados.
Debate
“Esa marca es un buen complemento para Amazon y les permitirá dirigirse de una forma más agresiva en el mercado de entrega de alimentos frescos a domicilio”, afirmó a la cadena financiera CNBC el directivo de la firma Technomic Darren Tristano.
Pero también destacaron las diferencias del modelo entre las dos firmas, ya que Amazon es fundamentalmente una plataforma para la venta de productos a los precios más bajos, y Whole Foods se enfoca a las clases más acomodadas.
La compra de Whole Foods permite a Amazon consolidar posiciones en el sector del comercio de alimentos y atajar los intentos del gigante comercial Wal-Mart por ampliar su propia presencia en el comercio electrónico ofreciendo sus propios productos en ese medio.
Con información de EFEAGRO