Según algunos científicos, el método de análisis más utilizado suele tender a pasar por alto factores fundamentales, como la biodiversidad, la calidad del suelo y los impactos de pesticidas
Francia. – Investigadores franceses, daneses y suecos han dicho que debería haber un mejor sistema para comparar los sistemas de producción convencionales y ecológicos, que tenga en cuenta no solo las diferencias en los rendimientos de los cultivos, sino también los impactos ambientales de los diferentes sistemas.
Según los tres científicos, el método de análisis más utilizado suele tender a pasar por alto factores fundamentales, como la biodiversidad, la calidad del suelo, los impactos de pesticidas y los cambios sociales, y esos descuidos pueden llevar a conclusiones erróneas sobre las ventajas de la agricultura intensiva y ecológica.
El método más común para evaluar los impactos ambientales de la agricultura y la alimentación es el análisis de ciclo de vida (ACV), pero la implementación en muchos «ACV es demasiado simplista y pasa por alto los beneficios de la agricultura ecológica».
“Nos preocupa que el ACV ofrezca una imagen demasiado limitada, y corremos el riesgo de tomar malas decisiones política y socialmente. Cuando se comparan la agricultura ecológica e intensiva, hay efectos más amplios que el enfoque actual no considera adecuadamente», dice Hayo van der Werf, del Instituto Nacional de Investigación Agrícola de Francia.
«Nuestro análisis muestra que los estudios actuales de ACV rara vez tienen en cuenta la biodiversidad y, en consecuencia, suelen perder ese beneficio más amplio de la agricultura ecológica», agrega Marie Trydeman Knudsen, de la Universidad de Aarhus, Dinamarca. «Estudios anteriores ya han demostrado que las fincas ecológicas respaldan niveles de biodiversidad aproximadamente 30% más altos que las fincas convencionales».
El uso de pesticidas es otro factor que debe considerarse. Los autores del informe dicen que entre 1990 y 2015 el uso de pesticidas en todo el mundo aumentó un 73%, y aunque los residuos de pesticidas en el suelo, el agua y los alimentos pueden ser dañinos, pocos estudios de ACV explican esos efectos.
Con información de: Hortnews