México es el primer importador de leche en polvo y el quinto en leche fluida
Redacción Agro Orgánico
Ciudad de México. – La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER), detalló en un comunicado que la producción lechera de México, concentrada en tres regiones con 11 estados de la República, está en condición de crecer y de fortalecerse en términos de sanidad, calidad, mecanismos de acopio, industrialización y consumo.
Sin embargo, cifras oficiales detectan que el país es el primer importador de leche en polvo y el quinto en leche fluida; tan sólo en 2018, se importó el equivalente a tres mil 740 millones de litros de ambos productos, más 2.3 millones de toneladas de otros lácteos.
Asimismo, el consumo anual de leche en el país es de 16 mil 120 millones de litros, esto es, 122 litros anuales per cápita.
Al respecto, Sader en reunión de trabajo en conjunto de instituciones responsables de tareas de acopio, comercialización, sanidad y financiamiento rural, dieron pauta hacia un plan de acción que involucrará en su diseño y compromisos a los productores e industrializadores de leche, y que pretende avanzar en el reto de la autosuficiencia alimentaria.
Por su parte, los subsecretarios de Autosuficiencia Alimentaria, Víctor Suárez Carrera, y de Agricultura, Miguel García Winder, reconocieron que México depende en alrededor de 35% de importaciones de leche en polvo y de productos lácteos.
“Ante estas cifras de importación, es viable determinar metas anuales de abatimiento de esta dependencia”, añadieron.
De mismo modo, subrayaron que productores e industriales de leche, particularmente de pequeña y mediana escala, han expresado su compromiso de fortalecer la actividad y, más que subsidios, lo que requieren es capacitación, asistencia técnica, financiamiento de la banca de desarrollo, certificaciones de calidad.
Cabe resaltar que en el diagnóstico preliminar analizado en la reunión se establece que la producción lechera de México sumó 12 mil 800 millones de litros en 2018.
La evaluación señala que la producción nacional de leche fluida se concentra en tres regiones. 1.- Chihuahua, Durango y Coahuila (con un aporte de 30% del total), 2.- Jalisco, Aguascalientes y Michoacán (26.6%), y 3.- Guanajuato, Querétaro, Hidalgo, estado de México y Puebla (24.7%).
Sader explica que existe potencial en estas regiones para elevar la producción y mejorar sus sistemas productivos, de sanidad y de manejo.
De mismo modo, García Winder destacó la importancia de incluir aspectos como tecnología avanzada para el acopio local de leche, regulación de impuestos y armonización de legislaciones y, un tema fundamental, atender el reto del cambio climático.
Por último, Sader detalló que entre los puntos a discutir y definir en próximas reuniones están: metas a alcanzar en autosuficiencia para 2024, mecanismos específicos para elevar la productividad (como mejoramiento de la genética del ganado, del manejo nutricional y de la reproducción, mecanización en la ordeña y red de enfriamiento) con consideraciones regionales y de tipo de productores, y fórmulas para la inocuidad, calidad y sanidad tanto de producción interna como de importaciones.