México es el cuarto productor mundial de alimentos orgánicos
Redacción Agro Orgánico
Ciudad de México.– Debido al incremento de la producción orgánica en el país, así como del valor que estos alimentos han adquirido a nivel nacional, es de suma importancia certificar que sean realmente orgánicos, señaló el diputado del partido Nueva Alianza, Ángel García Yáñez.
Al respecto, el legislador presentó una propuesta para modificar la Ley de Productos Orgánicos que busca transparentar todas las etapas de proceso de certificación orgánica, ya que –explicó– si bien los Organismos de Certificación Orgánica (OCO’S) son los encargados de avalar que los productos han sido sin tóxicos y sin perjuicio para el medio ambiente, la legislación, tal y como está, no establece mecanismos para regular su desempeño, “dejando abierto un amplio espacio para hechos de corrupción”.
Con base en lo anterior, el diputado de Nueva Alianza propuso en tribuna una reforma a diversas disposiciones establecidas en la Ley de Productos Orgánicos para que los productores conozcan, desde el comienzo del proceso, los requisitos que deberán cumplir y, en caso de que se les rechace el certificado, saber los motivos precisos del por qué.
Respecto a las certificadoras, agregó que se busca que cada una de estas cree un micrositio en su portal de internet, con el propósito de facilitar la información a los interesados.
“Creemos conveniente estimular la creación de un mayor número de empresas certificadoras, lo que sin duda fomentará la producción y consumo de estos alimentos mexicanos”, subrayó el legislador.
Asimismo, destacó que el consumo de productos orgánicos se presenta como una alternativa para una alimentación saludable, ajena a la utilización de agentes químicos durante su proceso de producción, lo que ha colocado a México en el cuarto lugar como productor de este tipo de alimentos a nivel mundial.
Refirió que los estados de Oaxaca, Chiapas y Michoacán utilizan casi el 50% de su superficie en cultivos de productos orgánicos, de los cuales un 86% es destinado a la exportación hacia Estados Unidos, Europa, Japón y China.
Tan sólo en el 2015, las exportaciones realizadas por este concepto alcanzaron 136 millones de dólares, de ahí la importancia de garantizar que el proceso de certificación de estos productos sea transparente, concluyó el diputado.