Las ventas mundiales de vinos ecológicos sobrepasarán los mil millones de botellas en 2022
El mercado de los vinos ecológicos (‘organic’, como se suele decir en inglés, o ‘bio’, en francés) crecerá rápidamente durante los cinco próximos años, ya que los consumidores con conciencia medioambiental buscan cada vez más los vinos libres de pesticidas, pero su parte del mercado total seguirá siendo relativamente pequeña, según un reciente estudio.
La consultora en vinos y destilados IWSR, en un informe del pasado mes de noviembre, predice que las ventas mundiales de vinos ecológicos tranquilos sobrepasarán los mil millones de botellas en 2022, mientras que fueron de 676 millones el año pasado, y casi tres veces más que los 349 millones de 2012.
El crecimiento en este quinquenio estará encabezado por Estados Unidos, con una subida de más del 14%, seguido por Sudáfrica y Noruega, con un 13,5%. El porcentaje de vinos ecológicos -los que proceden de viñas cultivadas sin pesticidas ni fertilizantes químicos- seguirá siendo relativamente bajo en el mundo, con un 3,6% frente al 2,4% en 2017, según el informe de IWSR.
«Hay un amplio margen para que los vinos ecológicos sigan en alza», dice José Luis Hermoso, director de estudios de IWSR. Es una buena noticia cuando el consumo mundial de vino está estancado, e incluso en descenso en mercados clave como Francia o España.
Casi cuatro de cada cinco botellas de estos vinos vendidas el año pasado lo fueron en Europa. Los tres líderes -Alemania, Francia y Reino Unido- coparon el 50% del mercado. En Francia el avance de las ventas de vinos orgánicos es particularmente fuerte, e IWSR prevé que su cuota de mercado alcance un 7,7% en 2022.
Château Latour, uno de los más prestigiosos de Pauillac, en Burdeos, que es propiedad del millonario francés François Pinault desde 1993, obtuvo se certificación ecológica el mes pasado. Pero otros productores han abandonado sus proyectos ecológicos, a menudo desalentados por las críticas crecientes de los pesticidas alternativos, como el cobre y el azufre, permitidos por los reglamentos ecológicos, o también después de que sus viñas, carentes de protección química, fuesen dañadas por enfermedades criptogámicas.
Según Hermoso, existe incertidumbre entre los viticultores europeos en torno al uso continuado de azufre. Añade que en algunas regiones el mildiu ha hecho mucho daño en 2018.
Las conversiones de viñas al cultivo ecológico en los principales países productores se han frenado recientemente, e IWSR estima que en 2022 habrá 545.000 hectáreas de viñedo ecológico en el mundo, frente a las 408.000 de 2017 y las 284.000 de 2012.
Con información de Reuters