El hambre global no ha hecho más que aumentar, debido en gran medida a los conflictos y al impacto del cambio climático, advirtió el organismo
Redacción Agro Orgánico
Roma, Italia. – Es crucial producir alimentos saludables y nutritivos de forma que se preserve el medioambiente, ya que alimentar a la gente debe ir de la mano con el cuidado del planeta, afirmó el Director General de la FAO, José Graziano da Silva, en la Asamblea General de Cáritas Internacional en Roma celebrada el 24 de mayo.
Graziano da Silva señaló que, desde la adopción de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible en 2015, el hambre global no ha hecho más que aumentar debido en gran medida a los conflictos y al impacto del cambio climático.
Para cumplir con estos 17 ODS se deben de efectuar primeramente los dos iniciales: erradicar la pobreza y generar la llamada “hambre cero” (cuyo propósito es poner fin al hambre mundial); “sin ellos será imposible cumplir los otros 15 objetivos”, declaró Graziano da Silva.
En el congreso, el director de la FAO presentó tres frentes principales con el fin de acabar el hambre y la pobreza: en primer lugar, reforzar la capacidad de recuperación de las comunidades rurales en zonas de conflicto; en segundo lugar, promover la adaptación de los agricultores familiares al impacto del cambio climático; y finalmente, mitigar la desaceleración económica a través de redes de seguridad social y políticas públicas.
Otro de los temas dialogados en la Asamblea, fue el gran problema de la obesidad. Hoy en día se estima que más de 2 000 millones de personas tienen sobrepeso, de las cuales 670 millones son obesas. Si continua este problema, el número de personas obesas en el mundo superará a la cantidad de personas que padecen hambre -821 millones en 2017-, esto ya ocurre en América Latina y el Caribe desde 2015.
“El problema del hambre se presenta en áreas específicas, particularmente en zonas de conflicto y áreas afectadas por el cambio climático, la obesidad está en todas partes”, señaló el jefe de la FAO.
Insistió en que se debe animar a los agricultores familiares a usar sus tierras para cultivar una variedad de cultivos ricos en nutrientes, incluyendo frutas y verduras. Esto se puede hacer, por ejemplo, introduciendo políticas y legislación para garantizar marcos institucionales que permitan la obtención de alimentos de agricultores familiares locales.
La obesidad es originada por el alto consumo de alimentos ultraprocesados como: los tienen poco o ningún valor nutricional, un alto contenido de grasas saturadas, azúcares refinados, sal y aditivos químicos.
“No sólo necesitamos producir alimentos, sino también alimentos saludables y nutritivos que preserven el medio ambiente. Alimentos saludables para todos”, enfatizó el director de la FAO.
Asimismo, recordó a la audiencia que los agricultores familiares son clave para el desarrollo sostenible, ya que la mayoría de los alimentos que se consumen en el mundo provienen de este sector rural.
“Se trata de impulsar las economías locales. Se trata de transmitir conocimiento de generación en generación. Se trata de respetar y valorar las tradiciones, costumbres y cultura locales. Se trata de mejorar la nutrición y proporcionar dietas más saludables que estén basadas en alimentos frescos, especialmente frutas y verduras. Se trata del desarrollo territorial local y de la sostenibilidad. Nada se acerca más al paradigma de desarrollo sostenible en los sistemas alimentarios que la agricultura familiar», afirmó Graziano da Silva.
Por último, hizo hincapié en que los agricultores familiares necesitan el apoyo de los consumidores; y, a su vez, los consumidores también necesitan de los agricultores familiares para alcanzar el desarrollo sostenible que el mundo necesita.