Ficosterra fabrica bioestimulantes y biofertilizantes a base de extractos de algas y microorganismos que favorecen el máximo desarrollo de cultivos y plantas, mediante productos 100% orgánicos, sostenibles y respetuosos con el medio ambiente.
Por Ana Isabel Rodríguez*
(Foto: DGCS UNAM)
México. – El uso de las algas marinas en la agricultura no es algo nuevo, pero su uso se ha incrementado considerablemente en los últimos 20 años debido a la investigación científica y el desarrollo tecnológico, que han permitido potenciar los beneficios de los insumos marinos en los cultivos agrícolas.
Al respecto, Luis Lombana, director de Grupo Ficosterra –empresa de biotecnología marina dedicada al desarrollo de insumos agrícolas con base en algas– señala que el aprovechamiento de los principios activos del mar en la agricultura es una alternativa viable y sostenible ante la demanda de productos que contribuyan a reducir el uso de fertilizantes convencionales.
“Con base en nuestro conocimiento de las algas marinas, Ficosterra ha transitado de una cultura no científica, basada en el uso milenario de las algas marinas en la agricultura, al desarrollo de productos altamente tecnológicos”, explica en entrevista para Agro Orgánico; algunos de sus productos, como bioestimulantes, biofertilizantes y fortificantes biológicos, contribuyen a regenerar los suelos, estimulan los cultivos, mejorar su productividad y aumentar la resistencia de las plantas al estrés ambiental.
La riqueza de las algas marinas está en que aportan una cantidad de nutrientes “impresionantes”, agrega el director de Ficosterra América, Roberto Marcos: “en el mar están todos los microelementos que existen en la naturaleza; las algas funcionan como biofiltros que asimilan esos micronutrientes, los transforman y almacenan”.
En particular las algas pardas, como la Macrocystis Pyrifera –que utiliza Ficosterra para el extracto de algas– con una altura de entre 40 y 50 metros, son como un “dinosaurio viviente” debido a que existen desde hace millones de años y su morfología no ha variado; se ha adaptado a todos los cambios a través del tiempo y tiene un sistema muy eficiente de asimilación y almacenamiento de nutrientes, explica.
Lo que Ficosterra hace con estas algas es transformar sus componentes en un extracto soluble. A diferencia de insumos similares en el mercado, los productos de la empresa aportan polisacáridos sulfatados –azúcares de reserva en el alga– como alginatos, laminarinas y manitol, que se agregan con pesos moleculares muy bajos para ser fácilmente asimilables por las plantas en tierra.
“Lo que nos diferencia como empresa es que el alga que usamos es una de las mejores del mundo para extracción de este tipo de productos. Y precisamente nuestra tecnología de extracción, totalmente diferente a las tradicionales, se nota en los resultados finales”, apunta Roberto.
Aunque los productos de Ficosterra han mostrado alta eficiencia prácticamente en cualquier cultivo, es en hortalizas, cucurbitáceas y berries –orgánicos y convencionales– en los que más ampliamente se han aplicado debido al valor de estos. En cultivos extensivos, como granos, han contribuido a incrementar la productividad y el rendimiento, así como en aguacate; en Colima, México, ya se aplica con éxito en cultivos de sandía, papaya, banano y cítricos.
Respecto a los rendimientos productivos y económicos, el director de Ficosterra España señala que estos oscilan entre los 9 y 15 por ciento. La empresa lo explica con una relación costo – beneficio de 1 a 3 y de 1 a 5: por cada peso que el cliente invierte en sus productos, recibe un incremento económico de entre 3 a 5 pesos.
Lee el artículo completo en la edición 26 de Agro Orgánico: https://agroorganico.info/wp-content/uploads/2021/04/26_Agro_Organico.pdf