México abastece 9 de cada 10 tomates que importa Estados Unidos, lo que representa el 55% del consumo total en ese país.
Por Redacción Agro Orgánico
México. — Ante la decisión “unilateral” del Departamento de Comercio de los Estados Unidos de imponer una cuota compensatoria ad valorem del 17.09 % a las importaciones de tomate fresco mexicano, el Consejo Nacional Agropecuario (CNA) aseguró que esta medida representa un retroceso en la integración de América del Norte y pone en riesgo la seguridad alimentaria de la región.
De acuerdo con el organismo, esta medida —que termina con el Acuerdo de Suspensión que estuvo vigente durante los últimos 28 años— también afecta a las y los productores nacionales; a todos los integrantes de la cadena productiva, así como a los consumidores estadounidenses, “lo que invariablemente repercutirá en un aumento de precios, impactando a varios alimentos de consumo cotidiano derivados de este producto”.
En un comunicado, el presidente del CNA, Jorge Esteve, recordó que México abastece 9 de cada 10 tomates que importa Estados Unidos, lo que representa el 55% del consumo total en ese país. Esta interdependencia —apuntó— ha sido clave para mantener una cadena agroalimentaria eficiente, segura, sana y resiliente en toda la región.
“México ha demostrado ser líder global en la producción de tomate gracias a su diversidad de climas, innovación tecnológica y décadas de inversión en sistemas agrícolas sostenibles. Nuestra oferta se ha consolidado por su calidad, variedad y eficiencia, características que el mercado estadounidense reconoce y valora”, agregó el CNA.
Por su parte, la Asociación Mexicana de Horticultura Protegida (AMHPAC) recordó que el origen de esta problemática reside en una investigación antidumping promovida por algunos productores estadounidenses en 1996, bajo el argumento de prácticas desleales de comercio por parte de los productores mexicanos.
Al respecto, la asociación precisó que dichos productores no representan la mayoría de la producción de tomate en los Estados Unidos, y que una parte sustancial de la producción doméstica en ese país sí apoya la continuación del Acuerdo de Suspensión.
En un comunicado conjunto con la Confederación de Asociaciones Agrícolas del Estado de Sinaloa (CAADES); el Consejo Agrícola de Baja California; el Sistema Producto Tomate y la Asociación de Productores de Hortalizas del Yaqui y Mayo (APHYM), la AMHPAC destacó que durante los años de vigencia del Acuerdo, los productores y exportadores mexicanos lograron modernizar el sector y generar un producto competitivo y de alta calidad que capturó la preferencia de los consumidores.
De tal forma —agregó— hoy en día, dos de cada tres tomates que llegan a la mesa del ama de casa en Estados Unidos, o son consumidos fuera del hogar, han sido cultivados y producidos por manos mexicanas.
“No hay en el corto, ni en el mediano plazo, países del mundo que puedan reemplazar el tomate mexicano en un mercado que hemos construido a base de innovación y esfuerzo por los últimos 120 años”.
Finalmente, las organizaciones agrícolas agradecieron el acompañamiento y apoyo del Gobierno de México, especialmente de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), la Secretaría de Economía (SE), la Embajada de México en Estados Unidos, así como de la presidenta de México, “por su invaluable apoyo y compromiso con el sector”, cuya participación, afirmaron, “ha sido fundamental durante todo el proceso de negociación”.