Más de 2.100 millones de pesos podrían dejar de entrar semanalmente a Michoacán por concepto de exportación de aguacate

Michoacán, México. – Más de 2.100 millones de pesos podrían dejar de entrar semanalmente a Michoacán por concepto de exportación de aguacate, esto de continuar el desabasto de diésel, por lo que se prevén altos índices de desempleo para los cortadores y aumento del precio en frutillas (fresas, zarzamora y moras) y aguacate, aseguran empresarios del ramo de Uruapan y Zamora.
No obstante, hasta el momento el secretario de Desarrollo Económico del Estado, Antonio Soto Sánchez y las autoridades locales no han intervenido para evitar escenarios peores.
Desde su perspectiva Soto Sánchez desconoce el protocolo de actuación para este tipo de problemas, lo mismo que de mercado e insumos. Pasa que toda la maquinaria de fumigación, recolección y transportación del aguacate y frutillas funciona con diésel, así como los más de 400 camiones que salen desde Uruapan, Zamora y Los Reyes para el extranjero y a los distintos mercados regionales del país.
Así, de no surtirse el combustible, la producción de la frutilla se reduciría al 33,3 por ciento y la del aguacate al 50 por ciento, lo que no solo va a significar una pérdida de la fruta y abaratamiento de ésta en el extranjero, sino que habría una perdida semanal de 100 millones de dólares, algo así como 2.100 millones de pesos, afirmaron los productores de Uruapan.
Y de no haber diésel para transportar la fruta los agricultores se verían en la necesidad de dejar de cortar y con ello la pérdida de empleo de miles de cortadores que trabajan por jornada, los llamados outsourcing que cobran por jornada o producción. Hasta ahora los encargados del área comercial de la Terminal de Abastecimiento y Distribución Zona Centro, en Morelia, se niegan a dar información de cuándo va a concluir el desabasto de diésel.
En tanto, se sabe por los empresarios de la gasolina, que hay promesa de parte de Pemex de abastecer a más tardar el martes, peo no se ha dicho si esta situación va a continuar.
Cabe mencionar que el desabasto viene experimentándose desde el mes de julio, pero que se ha agudizado desde el mes de septiembre, periodo en el que las estaciones de gasolina han estado recibiendo el combustible a cuenta gotas.
Aunado a las millonarias pérdidas del sector aguacatero, de las frutillas y limones, están las hortalizas y los comerciantes pequeños que abastecen a las comunidades más lejanas, por lo que el escenario también puede incluir crisis alimentaria.
Con información de Quadratín